Nuestras instalaciones son el fruto de trasladar la elaboración artesana y tradicional a los tiempos actuales aumentando la facilidad de limpieza e higiene, así como mecanismos que aseguren la trazabilidad de nuestro producto.
Disponemos de una sencilla cuba manual de ”baño maría” y una prensa neumática, ambas de acero inoxidable. Disponemos de una pequeña sala de ordeño directo donde la leche va directamente al tanque de frío ubicado en una sala independiente de la quesería que llamamos lechería, desde donde la leche va por su peso a la cuba para ser elaborada.
Como ven, no tenemos ninguna de esas modernas máquinas que utiliza la industria, pero básicamente, por que no nos hacen falta, ya que es cierto que somos artesanos, y es cierto que sólo elaboramos la leche cruda de nuestras cabras, por lo que no mezclamos leches de diferentes orígenes, porque es cierto que no necesitamos un equipo para poner la leche que viaja en camiones, con su natural deterioro, en las condiciones necesarias para hacer el queso, no… no… todo esto no nos hace falta. Nuestra única necesidad es obtener una leche de calidad cuidando el bienestar de nuestras cabras y su alimentación a base de piensos de elementos nobles sin subproductos de dudoso origen, y además, obtenerla de la manera mas higiénica y limpia posible vigilando la sanidad del rebaño.
Así pues nuestras instalaciones son sencillas,… pero por que no nos hace falta más, nuestra herramienta para hacer un buen queso es obtener una buena leche, no conocemos otra manera, ni seríamos capaces de hacerlo de otra manera.
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